martes, 8 de marzo de 2016

Pelple[1]

Nenua albilico
nua cheno etñasue:
edin cotsa enchesto,
desater olonvalo,
calpresto ed nuo,
platso cuor ne al
                              silpem.
Pelple, nuas horrendo,
levele desto in mortel.


La nada[2]

En una cabeza adentro
la noche te sueña:
de la cosa en serio,
al desatar el círculo,
enseguida es uno,
el que no ha venido
                              siempre.
Esa inmensa nada, de nuevas canciones,
se eleva hacia la vida.


Todo lo inmenso[3]

Dentro de una cabeza
sueña contigo la noche:
porque un objeto verdadero,
al desenredar un ovalo,
en ese instante es alguien,
el que no ha llegado
                                    nunca.
Todo lo inmenso, de novedosos cantos,
se yergue hasta lo naciente.


Inmensidad vacía[4]

Llevo el tiempo en el cobertizo de un...,
me abren paso las polleras.
Todo es en sueño,
me recuesto en la cobija,
 y a mis pies,
la sabiduría descansa.
El viento se mece
casi insólito
en  el aire
                enrarecido.
El poema habla,
a veces,
de un centro que…                                               
se descentra incontrolable.



[1]En caso de necesitarlo, llene los significantes para obtener un significado con carga semántica; de lo contrario, guíese por las traducciones que aparecen a continuación.
[2] Traducción de Horacio Sinfín para el Colectivo Menardiano, Nº 2, Bogotá, Colombia, marzo de 1988.
[3] Traducción de Luis Bentos Nunca para la revista literaria Octoneutro, Nº VI, Madrid, España, julio de 2000.  
[4] Traducción (versión libre) de F.S.R. Bueno para la revista Paradoxas, Nº XXI, Santiago de Chile, octubre, 1999.